Lima,
19 de Octubre del 2012
Señor
OLLANTA HUMALA
TASSO
Presidente de la República del Perú.
Presente.-
Ref.- Expediente 12-012005
Expediente 12-022086
De mi consideración:
Después
de estar ya acostumbrado a los continuos despropósitos del Poder Judicial en el
Perú, como por ejemplo la deplorable sentencia de Villa Stein que favorecía al
comando militar de aniquilamiento Colina, y que fue desbaratada por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. La ahora avalancha de exculpaciones a Vladimiro
Montesinos Torres y sus secuaces, me imagino intentando una próxima liberación.
Después de tanta inmundicia, al fin he podido disfrutar de un fallo judicial,
como aquel que condenó al genocida y ladrón Alberto Kenya Fujimori Fujimori con
las memorables palabras de “Más allá de cualquier duda razonable”.
Si Sr.
Presidente, el doce de Octubre del presente año, el Juzgado Penal Colegiado de
Nazca a impuesto al empresario Guillermo Franklin Horler Altamirano (ahora
prófugo), diez años de pena privativa de la libertad efectiva, como autor del
delito contra el cuerpo la vida y la salud en la modalidad de Homicidio
Doloso, en agravio de tres jóvenes ciudadanos chilenos, y cuatro ciudadanos
peruanos, una de las cuales era una niña de apenas tres años de edad. Además,
en pleno desarrollo del proceso judicial ha quedado evidenciado, que el acusado
había falsificado documentos (una vez más) para librarse de culpa, lo que pudo
ahora ser detectado a tiempo, y ya obra en poder del Ministerio Público en
Nazca, una nueva denuncia contra dicho empresario.
Muy
importante de este proceso judicial, a mi modesto entender, es la
fundamentación que realizaron los Jueces en la determinación de la sentencia, y
cito textualmente: Que habiendo olvidado
el encausado que ser Gerente General de dos empresas que brindan un servicio a
la sociedad para los ciudadanos nacionales y extranjeros, su estructura interna
y organización es desconocida, y confían en que detrás del nombre comercial
existe una sólida organización a cargo de los que por ley están obligados a
velar porque así sea y confían que el riesgo de morir en una aeronave no puede
presentarse sino por una situación ajena al descuido de quienes se encuentran
obligados a realizar cabalmente su labor, configurándose una labor de
Garante, pues como Gerente General con injerencia en sus empresas tenía el
deber legal de velar por que una persona jurídica funcione adecuadamente, dado
que la persona jurídica no tiene vida real sino que se sujeta a la gestión de
quienes lo encabezan.
Importantísimo
en la obtención de esta victoria judicial, ha sido la indesmayable
determinación de los padres de los jóvenes chilenos, en conseguir un castigo
ejemplar para este inescrupuloso empresario. Para ellos ha representado una
enorme inversión de tiempo y dinero, con la única esperanza de conseguir
justicia, para un dolor que llevarán el resto de su vida, porque estoy seguro,
no hay nada más doloroso para un ser humano, que perder un hijo.
Recalco
la importancia del coraje y la determinación de los familiares de los
ciudadanos chilenos, porque sin la directa voluntad de ellos, jamás se hubiese
obtenido una ejemplar sanción contra el empresario responsable de estas
muertes. Y es fácil afirmar para mí esta conclusión, porque basta comparar este
desenlace, con los otros dos siniestros aéreos ocurridos en la misma base de
Nazca, bajo similares circunstancias, y que ocasionaron la muerte de once
víctimas mortales mas.
Ejemplos
concretos:
En el siniestro aéreo
ocurrido el día 09 de Abril del año 2008, con la aeronave de matrícula 0B-1266,
que volaba bajo la bandera de la empresa Aeroica S.R.L. también de propiedad
del empresario Horler Altamirano, y donde murieron cinco ciudadanos franceses.
La sentencia que dictó el juzgado que llevo la causa, condenó al piloto
sobreviviente a cuatro años de prisión suspendida, y reconoce que una de las
principales causas de ocurrido el siniestro fue que la empresa no cumplió con
brindar la instrucción necesaria al piloto. Además, una de las primeras cínicas
declaraciones del empresario Horler Altamirano ante la prensa, fue que el
accidente ocurrió por un ataque de pánico de una pasajera. El piloto Carlos
Bartra en una entrevista aclara luego que Horler Altamirano lo emplazo a
sostener esta mentira, a lo que él se negó. Sin embargo, el juzgado no dictó
ninguna pena para Horler en esa ocasión.
Más escandaloso aún ha sido
el resultado de las investigaciones del siniestro aéreo de la aeronave OB-1808,
de la empresa Air Nazca S.A.C.
En la
investigación del accidente, se logró determinar mediante un examen
toxicológico emitido por dictamen pericial del Servicio de Toxicología Forense
del Instituto de Medicina Legal del Ministerio Público, que en la sangre del
Piloto al Mando de dicha aeronave Ricardo Dante Cárdenas García, había 0.51 gr.
0/00 de alcohol etílico. En otras palabras, estaba borracho, y así se le
permitió volar.
El
piloto Ricardo Cárdenas, además tenía graves problemas de conducta, y tenía
antecedentes policiales y penales, y había purgado condena en el Perú y en el
extranjero. Y así, le empresa le permitía seguir llevando pasajeros.
En la
investigación del siniestro aéreo de la aeronave OB-1808, también se determinó
que la instrucción a los pilotos y personal de mantenimiento no era el adecuado.
Se permitió que la aeronave despegue con exceso de peso, por lo cual se
encontraba fuera de los parámetros de peso y balance. Que todo el sistema de
combustible no correspondía al tipo de aeronave y no se conocía su
trazabilidad, y las válvulas de combustible no eran las apropiadas (y
estaban selladas con masilla), y que habían sido mal instaladas. El manual
de operación se encontraba incompleto, y aún así la autoridad les permitió
seguir operando. Los asientos de la aeronave estaban hechos de triplay.
Entonces una pregunta valida sería ¿Porqué
el Gerente General de Air Nazca S.A.C. no ha sido condenado también por
Homicidio Doloso?
Lo lamentable es, que la pérdida
de estas jóvenes vidas, pudieron haberse evitado. Las malas prácticas de
operaciones en la base aérea de Nazca, fueron denunciadas en la debida
oportunidad a la Dirección General de Aeronáutica Civil, a los Ministros de
Transportes de Turno, y al mismo Ministerio Público.. Las autoridades que
debieron velar por el escrupuloso cumplimiento de las normas previstas
internacionalmente para la aviación civil, se coludieron con irresponsables empresarios.
Hasta este momento, estas autoridades que permitieron estos malos manejos, se
encuentran limpios de polvo y paja. A la mediocre y corrupta administración de
la Dirección General de Aeronáutica Civil, nada le altera el sueño.
Ha quedado pendiente para la
administración de justicia (como uno más), el siniestro aéreo de Andoas
ocurrido el 05 de Agosto de 1998 (ya próximo a prescribir a una acción penal),
donde se violaron muchas normas de seguridad, como por ejemplo que los pilotos
no estaban habilitados para volar dicha aeronave, y los responsables de la
empresa TANS, fachada de la Fuerza Aérea Peruana para vuelos comerciales, les
permitió actuar como mercenarios, CORPAC los dejo despegar de Iquitos sabiendo
que llegarían de noche a un campo que no estaba habilitado para aterrizajes
nocturnos, etc, etc, etc, Como en este asesinato de 74 personas inocentes,
estaban involucrados altos mandos militares, ni la Policía, ni el Ministerio
Público, ni el Poder Judicial, jamás se atrevió a investigarlo.
Por
supuesto entiendo, que la sola denuncia de acciones criminales de funcionarios
públicos, civiles o militares, lo convierte a uno en un soplón que viola un código
de silencio que campea en toda la administración pública. La denuncia se
transforma en un ataque a la gobernabilidad del país. Pero eso, a estas alturas
de mi vida, me importa un bledo.
Esta vez
no puedo dejar de pronunciarme sobre la tan cacareada solicitud de indulto al
genocida y ladrón Alberto Kenya Fujimori Fujimori. Lo primero que se tiene que
advertir sobre esta solicitud, es que él hoy presidiario, que purga su condena
en una cárcel dorada y demuestra que la justicia en el Perú no es igual para
todos. El y su prole, pretendientes de una gracia presidencial, no sienten
la menor culpa por el daño moral y material que la mafia fujimontesinista
infringió al país, envileciendo el Estado y prostituyendo a instituciones
tutelares de la patria.
Indultar a Alberto Fujimori,
equivale decirle al país y a las generaciones venideras, que se puede dar
libertad a un criminal de lesa humanidad, si esta dentro de cálculos políticos.
Indultarlo, lo convertiría a usted Sr. Ollanta Humala Tasso, en cómplice de los
horrendos crímenes cometidos por Alberto Fujimori. Nos deja claro, que de haber llegado el fujimorismo nuevamente al
poder, no habrían tenido ningún escrúpulo en cometer todos los delitos que
cometió su líder, y de los cuales se sienten orgullosos.
La presión mediática,
grotesca manipulación que se está ejerciendo contra usted Sr. Presidente, trata
de convencerlo de que es un gobernante omnipotente, un monarca, un emperador,
por lo tanto, es libre de realizar las acciones que le venga en gana.
Deseo recordarle Sr.
Presidente, que usted no es ningún gobernante todopoderoso que puede realizar
acciones como le venga en gana. Recuerde usted, que sus acciones deben estar
encuadradas dentro de normas claras de legalidad. Tomar en cuenta las
consecuencias que estas acciones puedan después representar al país.
Si se cumple el despropósito
de indultar al genocida y ladrón Alberto Fujimori, usted sabe muy bien, que
Cortes Internacionales se van a pronunciar en contra de tan desatinado fallo, y
el indulto se va a tener que revertir, claro que con la distancia de Fujimori
en Japón, y con la vergüenza arrastrada por todo el país. A no ser que ese sea precisamente,
el cálculo político.
También es
bueno recordar, que han quedado pendientes las investigaciones por los delitos
de narcotráfico de todos los integrantes de la mafia fujimontisinista. No se ha
podido encontrar fiscales ni jueces que se atrevan a realizar dicha
investigación, porque de esa manera quedaría al descubierto que el Perú se podría
haber convertido en un NARCO ESTADO entre los años 1985 al 2001. Se tendría que
investigar desde los mandos que permitieron e incentivaron el narcotráfico en
diversas bases militares, pasando por todos los mandos medios y hasta el último
soldado que participó de este festín criminal e impune, y no valdría el
artificio de la obediencia debida ante estos crímenes de lesa humanidad.
Sin más que agregar por el
momento me despido de usted, agradeciendo la atención que sirva prestar a la
presente.
Atentamente,
Ricardo Valle Cabrera
DNI 07710808
Telf. 996-675-496
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