Castañeda 2015: La venganza

Jueves, 08 de enero de 2015

La República: Renato Cisneros.


“No habrá venganza”, anunció Castañeda cuando le preguntaron acerca del ánimo con que tomaba la posta de Susana Villarán. Mintió, evidentemente. Castañeda, hoy podemos constatarlo, nunca perdonó que Villarán invirtiese los primeros meses de su gestión en investigarlo y sacar a la luz las porquerías de Comunicore. Si aquel fue o no un error de oportunidad de Villarán, es debatible. Lo que sí está claro es que desde el momento en que se pusieron al descubierto las empresas fantasmas y los millones de soles desviados —toda esa mugre que acabó convirtiendo a Castañeda en el emblema automático del “roba pero hace obra”—, desde ese momento el ‘Mudo’ juró silenciosa revancha.
Lo que vemos en estos días es esa revancha consumándose a través del desmantelamiento prepotente de lo bueno que se hizo. Porque la gestión de Villarán —ineficaz en líneas generales— tuvo méritos sólidos que solo podrían negarle los miopes y prejuiciosos. Si Castañeda quería desactivar proyectos como Barrio Mío o Warmi Wasi, o cerrar el Parque de las Aguas, o finiquitar gerencias como la de Cultura y la de la Mujer, que venían funcionando bien, pudo hacerlo detallando ante los limeños —sus empleadores, finalmente— las razones técnicas de esas decisiones. ¿Era necesario poner gruesos candados en las puertas de las oficinas e impedir el ingreso de personal que ignoraba que ya no trabajaba allí? Nadie merece un despido así. ¿Era imprescindible dejar en la calle a tres mil trabajadores, algunos con contrato vigente, sin una evaluación previa?
Un alcalde tiene todo el derecho a descontinuar políticas que considera erróneas y deshacerse de gente que no es de su confianza. Pero sobre ese derecho está el deber de explicarlo dando la cara, como un líder, sin esconderse en las faldas de una teniente alcaldesa que intenta justificar estos descalabros con el cuento de la “caja quebrada” y la muletilla del “costo-beneficio”. Ojalá que Castañeda se ponga a trabajar por quienes lo eligieron y deje ya de desquitarse contra quienes lo desenmascararon.